Nuestra versión de los hechos...

Intravagantes es una nueva colección de Ediciones Evohé, que pretende celebrar la heterodoxia de autores, de perspectivas e ideologías, de escuelas literarias. Y también de géneros. En Intravagantes, para comprender el mundo y la existencia, mestizamos: poesía, novela, ensayo, teatro, cuento, testimonio, cómic, biografía, memorias.
En la luz y en la sombra de esta colección late nuestra versión de los hechos, porque lo que importa no es el formato sino la palabra. Y cada palabra basta para ser testimonio compartido de la búsqueda de la verdad en lo diverso, aquello que no está en ningún espacio que tengamos que esforzarnos por alcanzar, sino en nosotros mismos.
Dijo Aristóteles “la finalidad del arte es dar cuerpo a la esencia secreta de las cosas, no el copiar su apariencia”. Así nuestros Intravagantes despliegan muy distintas formas de expresión pero siempre contienen nuestra duda y nuestra certeza, nuestro asombro y nuestra familiaridad, nuestras preguntas y nuestras respuestas ante la dulzura del mundo y también de su amargura.
La única seña de identidad cifrada en Intravagantes es la grandeza de la diversidad humana.

lunes, 27 de mayo de 2013

Diario Las Provincias


                                  EL CORAZÓN DEL LOBO

22 Mayo 2013

Nos guían. Nos teledirigen. Nos encauzan. Nos manipulan. Come esto, bebe aquello, compra lo otro, vacaciona aquí. Acaban de publicar la última basurilla folletinesca de un tipo megaventas con aire de sepia pasmada y el reclamo abruma: "Un millón de ejemplares lanzados para la primera edición." Se conoce que el gigantismo vende, de ahí que nos apabullen con semejantes cifras.

Pero, amigo lector, si me permites, en ocasiones interesa salirse del camino trazado y descubrir joyas que merecen nuestra atención. Nos somos replicantes y nuestro paladar no siempre se colma con hamburguesas aceitosas. En estas últimas semanas he disfrutado como un bellaco leyendo dos novelas, "El corazón del Lobo", de Rafael Soler, y "Memento Mori", de César Pérez Gellida. La primera cumple treinta años y lo celebran reeditándola. Me la perdí en su momento y la he devorado ahora con una urgencia de peligro atómico que me mantuvo atribulado y exhausto. Mientras la leía sentía como si me apuntasen con una automática de grueso calibre porque el verbo de Soler deslumbra y provoca un rugir de meninges tremendo. Qué maravilla, leer algo mientras parece que el frío cañón de un arma presiona contra tu nuca. Y con "Memento Mori" he descubierto un novelón criminal de los que nunca se escriben en este país. Uno de los protagonistas, un asesino en serie, podría proyectar su mirada contra los ojos de mismísimo Hannibal Lecter, ese coloso inmortal, y no pestañearía. Literatura made in Spain de alto voltaje. Palabras escritas con entrañas y fundamento que nos sacuden el alma y nos reconcilian con el mundo gracias a una prosa venenosa que se incrusta en nuestras venas. Me temo que no venderán un millón de ejemplares, ni medio, pero, amigo lector, si te atreves, escapa de lo trillado, hinca el diente en estos solomillos y luego me cuentas.
 

                                                                          Ramón Palomar

No hay comentarios:

Publicar un comentario